Los 57,000 niños de América Central que han llegado a través de la frontera entre Estados Unidos y México desde octubre del pasado año hasta la fecha lo han hecho impulsados, en gran parte, por el propio Estados Unidos. Aunque los demócratas y los republicanos se han señalado con el dedo el uno al otro, en realidad, la ola de inmigrantes procedentes de El Salvador, Guatemala y Honduras tiene sus raíces en seis décadas de políticas estadounidenses llevadas a cabo por miembros de ambos partidos.
Desde la década de 1950, Estados Unidos ha sembrado violencia e inestabilidad en América Central. Décadas de juegos políticos, astucia durante la Guerra Fría, unidas a la lucha global contra las drogas, han dejado un legado de caos y brutalidad en estos países. En muchas partes de la región, la sociedad civil dio paso a la anarquía. Éstas son las condiciones de las que los niños están escapando.
La versión original de este artículo fue publicada en HuffPost Latino Voices por Ryan Grim y Roque Planas. La traducción es de María Guardado.
Desde la década de 1950, Estados Unidos ha sembrado violencia e inestabilidad en América Central. Décadas de juegos políticos, astucia durante la Guerra Fría, unidas a la lucha global contra las drogas, han dejado un legado de caos y brutalidad en estos países. En muchas partes de la región, la sociedad civil dio paso a la anarquía. Éstas son las condiciones de las que los niños están escapando.
La versión original de este artículo fue publicada en HuffPost Latino Voices por Ryan Grim y Roque Planas. La traducción es de María Guardado.